Esta crisis comenzó el 02 de Julio de 1997 con la devaluación de la moneda tailandesa. Luego de este hecho, se devaluó la moneda de Malasia, Indonesia, Filipinas, Hong Kong y Corea del Sur. Sin sospecharlo, se convirtió rápidamente en la primera gran crisis, en economía globalizada.
Las economías de los países de sudeste asiático mostraron cifras muy elevadas de crecimiento antes de la crisis (del orden del 8% al 12% del PIB). Esto se conoció como el “milagro económico asiático”. Además, como prueba de su exitosa economía, lograron reducir considerablemente la pobreza, mejoraron los estándares de educación y mejoraron la igualdad de ingresos.
Existen dos interpretaciones de la crisis:
1.- Un cambio brusco de las expectativas de mercado: generó entre otras cosas, la caída del tipo de interés y la salida de capitales. Esto, sumado a la mala reacción del Fondo Monetario Internacional (FMI).
2.- La inestabilidad del mercado internacional: genera pánico financiero, lo que provoca desconfianza. Esto suspende los préstamos incluso a países solventes.
Debido a la gravedad de la crisis, los países asiáticos involucrados experimentaron devaluaciones de su moneda, el desplome de sus bolsas y el incremento de la cesantía, entre otras consecuencias. Una de las principales consecuencias fue la brusca caída del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), como se puede ver en el siguiente cuadro:
Las economías de los países de sudeste asiático mostraron cifras muy elevadas de crecimiento antes de la crisis (del orden del 8% al 12% del PIB). Esto se conoció como el “milagro económico asiático”. Además, como prueba de su exitosa economía, lograron reducir considerablemente la pobreza, mejoraron los estándares de educación y mejoraron la igualdad de ingresos.
Existen dos interpretaciones de la crisis:
1.- Un cambio brusco de las expectativas de mercado: generó entre otras cosas, la caída del tipo de interés y la salida de capitales. Esto, sumado a la mala reacción del Fondo Monetario Internacional (FMI).
2.- La inestabilidad del mercado internacional: genera pánico financiero, lo que provoca desconfianza. Esto suspende los préstamos incluso a países solventes.
Debido a la gravedad de la crisis, los países asiáticos involucrados experimentaron devaluaciones de su moneda, el desplome de sus bolsas y el incremento de la cesantía, entre otras consecuencias. Una de las principales consecuencias fue la brusca caída del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), como se puede ver en el siguiente cuadro:
Fuente: http://www.monografias.com/trabajos11/finte/finte.shtml#desa
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